Materiales: Incienso o palo santo, velas negras o blancas.

Cómo hacerlo: Limpia tu espacio utilizando incienso o palo santo, recorriendo cada habitación mientras te concentras en la intención de eliminar la energía estancada o negativa. Puedes también encender una vela negra (para protección y limpieza) o blanca (para pureza). Mientras limpias, recita una afirmación como: «Limpio este espacio de toda energía negativa y lo lleno de paz y armonía».

Materiales: Sales de baño (preferiblemente sal marina), hierbas (como romero o lavanda), aceites esenciales.

Cómo hacerlo: Llena la bañera con agua caliente y añade sal marina y hierbas relajantes. Sumérgete y visualiza cómo el agua limpia y disuelve cualquier energía negativa, cansancio o emociones que necesiten ser liberadas. Concéntrate en dejar ir cualquier cosa que ya no te sirva.

Materiales: Papel, bolígrafo, vela negra o morada.

Cómo hacerlo: Escribe en un papel las relaciones, situaciones o hábitos de los que deseas desprenderte. Enciende la vela y, mientras lees lo que escribiste, visualiza cómo cortas cualquier lazo energético con esas situaciones. Luego, quema el papel de manera segura y permite que la energía de la llama lo transforme en cenizas, simbolizando el cierre y la liberación.

Materiales: Papel, bolígrafo, vela blanca.

Cómo hacerlo: Escribe una carta a alguien que necesites perdonar o a ti mismo/a. Expresa todos tus sentimientos y luego enciende una vela blanca, simbolizando la paz y la pureza. Lee la carta en voz alta y luego quémala de forma segura. Mientras el papel se quema, visualiza cómo el resentimiento y el dolor se disipan, dejando espacio para la paz interior.

Materiales: Cristales, agua con sal, incienso.

Cómo hacerlo: Durante la Luna Menguante, es un buen momento para limpiar y purificar tus cristales. Sumérgelos en agua con sal (asegúrate de que los cristales puedan estar en contacto con agua) durante unas horas y luego pásalos por el humo del incienso para purificar cualquier energía acumulada.

Materiales: Agua con vinagre, hierbas secas, velas.

Cómo hacerlo: Limpia tu casa con agua mezclada con vinagre y añade unas hierbas secas como romero o salvia. A medida que limpias físicamente el espacio, enfócate también en limpiar la energía del hogar, eliminando cualquier negatividad acumulada.

Materiales: Un cuaderno o diario, bolígrafo.

Cómo hacerlo: Durante la Luna Menguante, escribe en tu diario sobre aquellos pensamientos, miedos, preocupaciones o patrones de comportamiento que deseas liberar. Esta fase es ideal para la introspección y para trabajar en comprender qué necesitas dejar ir para avanzar hacia el siguiente ciclo con mayor ligereza.

Materiales: Espacio tranquilo, incienso (opcional).

Cómo hacerlo: Encuentra un lugar cómodo y realiza una meditación guiada o propia enfocada en soltar y liberar. Visualiza cualquier emoción, persona o situación que te haya estado pesando, y siente cómo se disuelve y se aleja de ti con cada exhalación. Utiliza esta meditación para crear espacio para la renovación.

Materiales: Aceites esenciales relajantes (como lavanda), velas.

Cómo hacerlo: La Luna Menguante es un momento de descanso y rejuvenecimiento. Dedica tiempo a cuidar de ti mismo/a, aplicando aceites esenciales en un masaje o practicando yoga suave. Haz actividades que te permitan relajarte y desconectar de las tensiones acumuladas.

Materiales: Cinta o cuerda, tijeras.

Cómo hacerlo: Usa una cinta o cuerda para representar un mal hábito que quieras dejar atrás. Visualiza cómo este hábito te ha limitado y, cuando te sientas listo/a, corta la cuerda con unas tijeras, diciendo: «Rompo este hábito y libero su poder sobre mí». Este acto simboliza el rompimiento del ciclo negativo.

Materiales: Caja o bolsa.

Cómo hacerlo: Haz una limpieza en tu hogar y recoge objetos que ya no necesitas. Coloca estos objetos en una caja o bolsa y prepárate para donarlos o desecharlos. A medida que liberas objetos físicos, también estás limpiando tu espacio energético y abriendo espacio para lo nuevo.

Materiales: Vela negra o blanca, papel, bolígrafo.

Cómo hacerlo: Enciende una vela y siéntate frente a ella. Escribe en un papel lo que deseas dejar atrás en esta fase lunar: hábitos, pensamientos o situaciones. Luego, mientras miras la llama, repite tu intención de soltar aquello que te ata. Quema el papel y observa cómo las cenizas se llevan la carga.

Materiales: Un espacio tranquilo, incienso o vela.

Cómo hacerlo: Dedica unos momentos a reflexionar sobre el ciclo que está llegando a su fin. Haz una oración de agradecimiento, despidiendo todo lo que ya no sirve y expresando gratitud por las lecciones aprendidas. Puedes encender un incienso o una vela como símbolo de cierre.

Materiales: Diario, bolígrafo.

Cómo hacerlo: Aprovecha la energía introspectiva de la Luna Menguante para reflexionar sobre el ciclo lunar que está terminando. Haz una lista de las lecciones aprendidas y aquello que necesitas dejar atrás para tu crecimiento personal. Usa este tiempo para conectarte contigo mismo/a y profundizar en tu autoconocimiento.